miércoles, junio 20, 2007

Hay un silencio y una continuidad que no dejan huellas. No importa si sufrimos o no. Hay silencio, sólo silencio. Pasa, a veces, el recuerdo de puntillas.

Nada debe romperlo. Este silencio, está lleno de dignidad.

Y ya dije que no. No se rompe.





5 comentarios:

Benjamín León dijo...

Un silencio lleno de dignidad, qué difícil y qué necesario. Cuídese Arpi, espero que ande bien en su brujimundo.

Saluditos

Anónimo dijo...

ben...ni imaginas que gusto me da ver(te) tus letras por aquí.
En cuidarme ando, beso grande

drakealone dijo...

La continuidad, my dear Watcher, jamás deja huellas, de lo contrario se transformaría en permanencia, no le parece?
El silencio, sabe?, es un envase de vidrio, el más claro que pueda encontrarse; es por ello que la mayoría de los humanos hablan siempre de romperlo, porque la mayoría es lo único que sabemos hacer... muy pocos son los que saben llenarlos y llenar, con el contenido de este envase el alma de los otros.

Y... es que ya han pasado seis meses? Je n'en sais rien... desconozco el tiempo. Supongo que han pasado o están cerca, los otros 100 kilómetros fueron ya recorridos desde hace varios días. Así que por usted, y nada más que por usted, me obligo a 'postear' este día (si se me permite el barbarismo).

Salud

Anónimo dijo...

Drake,beso

ciao, bello

Son Poemas dijo...

Hay silencios... y... silencios.

Un saludo.

Gracias.