miércoles, agosto 16, 2006

No podría decir qué es él.

No puedo decir:
“él fue mi cicatriz”
porque me sigue supurando
un día sí
y
otro también.
No hay
cicatriz
sino se cierra
la herida

No podría decir qué fue de él.

No puedo decir:
“él está aquí o allí”
porque no se donde está.
Ni nunca estuvo
en lugar
que yo pudiera alcanzar.
No hay
sitio
en el que me deje
aire.

No podría decir qué será de él.

No puedo decir:
“lo olvidaré”
porque no lo recuerdo.
Para mí
no tiene rostro
ni cuerpo.
Sólo, a veces,
escucho
una
voz.


No hay comentarios: