Te veo...

Lo que falta es más tiempo para ocupar las manos
Lámparas para iluminar la sombra de las puntas de los dedos
que están tan perdidas sin surcos que recorrer.

Faltan contrastes verdes y azules encerrados en botellas,
sesiones sólo para iniciados de cicatrices que no duelen
y alguna cosa más que ahora mismo no recuerdo.

Faltan instantes encerados para que resbalen muy rápido,
para que corran directos al final del vacío,
que el silencio, rodeado de deseos, se rinda en el precipicio.

Lo que falta es más sol en cada invierno
para poder hacer el amor con las ventanas abiertas,
falta más amor para poder rehacerlo en cada mañana,
y más bocas listas para correr tras otras bocas llenas de risas.

Sobretodo, faltan esos ojos de color
- ¿de qué color? –
que jamás cansa mirar